Cuando la gente piensa en crowdfunding inmobiliario, probablemente se imagina algo parecido al juego en línea más popular del mundo: los videojuegos. Sin embargo, el crowdfunding es una forma de formación de capital en rápido crecimiento, pero aún muy mal entendida, con la que mucha gente no está familiarizada. También se utiliza en una variedad de otras industrias y campos de estudio en los que no esperarías necesariamente que se aplicara. Si es usted propietario, lo más probable es que haya oído hablar de ella en algún momento de su vida. Pero que haya oído hablar de ella no significa que la entienda. De hecho, muchas personas que descubren esta nueva forma de recaudar dinero de familiares y amigos aún no están seguras de cómo funciona o qué tipo de ventajas pueden esperar a cambio de su inversión. Afortunadamente, hemos elaborado este manual sobre crowdfunding para ayudarle a entender qué es, cuáles son sus distintos tipos y qué recompensas puede obtener por respaldar financieramente un proyecto. Así que, tanto si eres nuevo en este concepto como si eres un veterano que quiere sacar el máximo partido de cada oportunidad de recaudación de fondos, ¡sigue leyendo!
El crowdfunding es una nueva forma de recaudar dinero para proyectos o empresas. En lugar de depender de bancos o inversores para obtener préstamos, el crowdfunding consiste en recaudar dinero de un gran número de personas con un proyecto propio. Los sitios web de crowdfunding permiten a la gente encontrar proyectos que puedan ser de su interés y hacer una promesa, ya sea a través de un formulario web o de un simple correo electrónico, para ayudar a financiar el proyecto. Cuando el proyecto concluye, se suele recibir algún tipo de recompensa a cambio de la donación.
Existen varios tipos de crowdfunding, y cada uno tiene sus propias ventajas e inconvenientes. Éstos son los más comunes: Indiegogo: Es la mayor plataforma de crowdfunding del mundo. Se utiliza para todo tipo de proyectos, como el desarrollo de nuevos productos, la financiación colectiva y las iniciativas benéficas. Fundable: Fundable está gestionada por la misma empresa que Indiegogo y se utiliza para iniciativas de crowdfunding más tradicionales, como el desarrollo de productos, la financiación de proyectos y la preventa de películas. Kickstarter: Kickstarter se dedica a la creación de nuevos productos y/o servicios, y es el más famoso de los sitios web de crowdfunding.
Una de las principales ventajas del crowdfunding sobre otras formas de formación de capital es que el proyecto en sí -no sólo la recompensa que recibes por respaldarlo- puede recaudar la mayor cantidad de dinero. Esto se debe a que la mayoría de las campañas de crowdfunding no incluyen los costes de inversión y funcionamiento de una empresa en el precio del proyecto. En su lugar, todos los patrocinadores reciben un regalo, como una camiseta o una tarjeta regalo, que pueden utilizar para lo que quieran. No hay más coste para los patrocinadores que el de los productos que han respaldado. El crowdfunding también permite probar un nuevo producto o servicio antes de comprometerse con una producción a mayor escala.
Inversión sin riesgo – Como las campañas de crowdfunding no requieren que pongas dinero, puedes probar nuevos productos o servicios, o financiar el desarrollo de una nueva idea de negocio, antes de comprometerte con una producción a mayor escala. Esto es estupendo si quieres probar un nuevo producto, pero no tanto si no te gusta y quieres que te devuelvan el dinero. Feedback y crowdsourcing: el crowdfunding te permite dar tu apoyo a un proyecto, pero también obtener feedback sobre tu propio producto o servicio de la gente que lo ha respaldado. Esto es genial, porque puedes hacerte una idea de cómo son realmente tu producto o tus servicios, y puedes iterar sobre tu diseño y estrategia de marketing para asegurarte de que es perfecto antes de la financiación colectiva.